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Descripción

Las alisedas son bosques de formación lineal que se crean junto a los cauces de los ríos, desde el manantial hasta que vierte sus aguas en el mar, aunque es difícil encontrar alisedas por encima de 700 metros. Sobre todo, impera en zonas de clima suave y lluvioso sin grandes oscilaciones, junto al río y en tierras que se encharcan. En esas zonas, en cuyos terrenos vacíos en los que se forman agujeros, se inundan con las crecidas del río, como el agua lleva poco oxígeno, la tierra enseguida se queda sin oxígeno. En esas dificultosas condiciones, el aliso resiste, porque transporta desde las hojas a las raíces el oxígeno necesario. En cuanto a la composición de las alisedas, son bosques oscuros, enredados y cerrados. En los valles más anchos, desde el río se filtra la luz entre los árboles del bosque de ribera.

Especie representante

El aliso (Alnus glutinosa) es un árbol caducifolio. De hojas simples y en espiral, presenta una punta roma o recortada. Bordes dentados, y con pelos en el envés. Planta monoica. Las flores macho se organizan en gerbas, siempre de tres en tres. Las hembras en cambio, desnudas, es decir, flores sin pétalos. La flor macho pardo-rojiza y la hembra verde. Los frutos son leñosos, se asemeja a una piña. Las alisedas han soportado una presión muy alta, sobretodo en los fondos de valle, la construcción y algunas otras actividades humanas, la anchura de algunas alisedas ha menguado bastante; y así en algunos enclaves los bosques de ribera dominados por alisos tienen anchuras de un par de árboles.

Especies acompañantes

Tipos de aliseda en el valle de Larraun y alrededores

a) Alisedas de la cuenca del Ebro.

b) Aliseda de ladera.

c) Alisedas cantábricas.

Elementos del paisaje cultural ligados a aliseda

Bosque lineal que presenta una limitación superficial, lo que unido a la merma superficial sufrida, lo sitúa como uno de los hábitats boscosos más dañados de la zona norte de la Península Ibérica. En los bosques de ribera (incluidas las alisedas) apenas se ha empleado el trasmocheo, si bien puntualmente se localizan algunos ejemplares, pero suelen ser pocos y muy disgregados.

Por lo tanto, los elementos del paisaje cultural ligados con los bosques de ribera (entre ellos las alisedas) son materiales que se obtienen del mismo, como pueden ser las estacas y/o varas de sauce, fresno y avellano que se emplean para cerramientos, vallas, puertas y demás elementos de división entre parcelas. A través de la madera flexible de estas especies se crean estos elementos del paisaje cultural, ligados sobre todo a la campiña atlántica.

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